Te recibimos en el aeropuerto de El Dorado de Bogotá y te llevamos al hotel donde podrás descansar, mientras vas aclimatandote a la altura. Nuestro mecánico estará disponible para ayudarte a ensamblar tu bicicleta y dejarla lista para los días de ruta que se vienen. Luego de esto, nos reuniremos para una charla introductoria donde conocerás al equipo y todos los detalles del tour. Cerramos el día con una cena especial de bienvenida: buena comida, risas y la emoción de lo que está por venir en los próximos días.

80 kilómetros
1.010m desnivel acumulado

La aventura arranca temprano desde Bogotá, viajando en nuestras cómodas camionetas rumbo al corazón de Boyacá. Tras aproximadamente 1 hora y media de camino, llegaremos al punto donde empieza la magia: un pequeño rincón rodeado de montañas, donde el aroma de las arepas boyacenses recién hechas y el café de la región nos darán la bienvenida. Aquí podrás disfrutar de un desayuno típico y cargar energías antes de ponerte en ruta.

La rodada comienza por carreteras tranquilas, casi sin tráfico, que serpentean entre montañas verdes y paisajes que parecen sacados de una postal. El aire fresco, el sonido de los pájaros y la sensación de libertad sobre la bicicleta harán que olvides el tiempo.

Después de 60 km de pura conexión con la naturaleza, llegaremos a uno de los pueblos más icónicos y hermosos de Colombia, donde haremos una parada para probar bebidas típicas y recargar energías. El último tramo del día —unos 25 km— nos llevará a un pueblo pintoresco que te robará el corazón. Aquí, un almuerzo con la mejor gastronomía local te estará esperando y tendrás tiempo para pasear sus calles llenas de color, visitar talleres de artesanos y descubrir piezas únicas que querrás llevar a casa: desde decoración hasta accesorios con el sello auténtico de Boyacá.

Para cerrar el día, subiremos a los vehículos para un corto trayecto de 25 minutos hasta nuestro hotel, donde podrás relajarte, descansar y prepararte para lo que viene.

105 kilómetros
1.930m desnivel acumulado

Hoy te espera una de las etapas más bellas que podrás pedalear en Colombia. La aventura arranca con un puerto de montaña de 16 km que, aunque un poco exigente, te regalará vistas que querrás guardar para siempre en tu memoria… y en tu cámara. Cada curva es una postal y cada pedalazo una pequeña victoria.

Después, un descenso espectacular nos llevará hasta el borde de una laguna rodeada de montañas. Pedalearemos por sus alrededores, atravesando pueblos llenos de vida y color, donde haremos una breve parada para probar bebidas típicas que repondrán tus energías y te conectarán aún más con la cultura boyacense.

Con fuerzas renovadas, afrontaremos el último tramo: un puerto de montaña de esos que exigen todo de ti, que hacen que mires el reloj deseando llegar… pero que, al coronarlo, te recompensan con una sensación de orgullo que solo entiende quien ha llegado hasta aquí.

Al llegar a nuestro pueblo destino, tendrás tiempo para disfrutar de un merecido almuerzo, recorrer sus calles empedradas y llevarte a casa recuerdos únicos de la ropa que hacen en la región con lana de ovejas donde solo se encuentran en esta región de Colombia. Lo que viene en los próximos días promete tanto como lo que ya hemos vivido.

105 kilómetros
1.900m desnivel acumulado

Comenzaremos el día con un traslado en carro de aproximadamente una hora hasta el punto de inicio de nuestra rodada. Desde allí, las piernas entrarán en calor con una subida suave, de esas que parecen no terminar pero que no exigen al máximo: los famosos falsos llanos que unos aman y otros prefieren evitar… hasta que se dan cuenta de que esconden paisajes que lo compensan todo.

Avanzaremos por tranquilas carreteras rurales, rodeadas de montañas y campos que cambian de color a cada kilómetro. En el camino atravesaremos pintorescos pueblos de la región, donde el tiempo parece ir más despacio, y tendremos el privilegio de visitar uno de los pueblos más pequeños de Colombia, un lugar tan singular como encantador.

La ruta seguirá revelando rincones únicos, perfectos para detenerse a tomar fotos y respirar aire puro, antes de llegar a nuestro destino final del día, donde nos esperará un merecido descanso y buena comida para recargar energías… porque la aventura todavía tiene mucho por delante.

70 kilómetros 1.130m desnivel acumulado

El día comienza con un traslado en carro de aproximadamente hora y media. Después de esto, la rodada del día arrancará muy cerca a la ciudad de Bogotá. Pedaleamos por la sabana bogotana, un territorio de paisajes verdes y montañas que nos regalará alguna que otra subida corta pero exigente. Bordearemos una gran represa y haremos una parada en un pintoresco pueblo para recargar energías con algo típico de la región.

Para cerrar la jornada, entraremos a Bogotá por una de sus rutas más icónicas para ciclistas, donde entenderás por qué este deporte es casi una religión en la ciudad: carreteras tranquilas, ascensos perfectos para entrenar y vistas que te harán olvidar el cansancio. La meta del día será en un reconocido café ciclista, de esos que respiran pasión por el pedal, donde nos recibirán con la calidez de casa y una buena taza de café que sabrá a recompensa.

Con el corazón contento y las piernas listas para un último esfuerzo, nos preparamos para el gran cierre del tour.

30 kilómetros 900m desnivel acumulado

Este día iniciaremos la rodada por el puerto de montaña más pedaleado del mundo según Strava, un clásico que todo ciclista debe conocer y conquistar al menos una vez en la vida. Este ascenso, enclavado en los cerros orientales de Bogotá, combina el ambiente vibrante del ciclismo local con paisajes verdes y vistas únicas de la ciudad.

Pedalearemos por las montañas que rodean Bogotá, donde los paisajes se vuelven épicos y el ambiente cambia por completo en pocos minutos: de la ciudad bulliciosa pasamos a internarnos en un entorno de verdes intensos y carreteras que respiran ciclismo. Será una ruta corta, algo exigente pero profundamente gratificante, perfecta para cerrar la experiencia con el corazón arriba y la sonrisa amplia, llevando contigo el recuerdo de haber rodado en una carretera legendaria.

Al terminar la rodada, disfrutaremos de un gran almuerzo en una de las zonas más particulares de la ciudad, ideal para saborear la diversidad gastronómica de distintas regiones del país, donde podrás escoger la que más se ajuste a tu gusto. La tarde será libre para que cada uno explore Bogotá a su manera y en la noche nos volveremos a reunir para compartir la cena de despedida, celebrando juntos el cierre épico de una aventura que quedará grabada para siempre en las piernas… y en la memoria.

Tras una semana de pedalear por carreteras épicas, conquistar montañas, dejarse maravillar por los paisajes más auténticos de Colombia y descubrir parte de la auténtica cultura colombiana, llega el momento de la despedida. Después del desayuno te llevamos al aeropuerto, pero no es un simple traslado: es el cierre de una experiencia que quedará marcada en tus recuerdos y en tus piernas. No te llevas solo kilómetros recorridos, sino la esencia de un país vibrante, la calidez de su gente y la satisfacción de haber vivido una aventura única sobre dos ruedas. Colombia siempre tendrá nuevas rutas y desafíos para ti, y nosotros estaremos listos para rodar juntos una vez más.